Capítulo 8: I.A. y toma de decisiones.

Capítulo 8: I.A. y toma de decisiones.

¿Ser o no ser? Esa es la cuestión. Bueno, esa era la cuestión porque hoy hay pocas opciones para no ser. Pero disyuntivas hay muchas. Durante el día tomamos muchas decisiones y en los negocios más. ¿Porque volteamos a la Inteligencia Artificial? Para eso, para tomar mejores decisiones.

Esto es Cerebro de Silicio, el futuro de la Inteligencia Artificial, hoy.

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Capítulo 8: I.A. y toma de decisiones.

Muchas personas, directores y dueños de empresas, ejecutivos y gerentes, me han preguntado sobre la factibilidad de Inteligencia Artificial. La verdadera aplicabilidad de una estrategia de I.A. en sus negocios. Y tienen razón. De cierta forma es comprensible. Los avances tecnológicos siempre han estado disponibles para las Fortune 100 Companies, empresas que pueden invertir e invierten millones de dólares para obtener ventajas competitivas importantes. Sin embargo ¿quién se acuerda de las 100,000 Unfortune Companies? Las 1,000 o 10,000 o 100,000 que siguen en la lista. Muchas veces hay que esperar años o décadas para obtener la tecnología a costos accesibles. Lo cierto es que aún hoy, existe la la idea de que la Inteligencia Artificial no ha llegado a permear en las empresas medianas o chicas, que son la mayoría en mercados emergentes como los de Latinoamérica.

- “Si, lo entiendo”, me dicen. “Pero eso es para empresas como Google o Amazon. Para Ford o General Motors. Para Shell, Citigroup, Walmart, Pfiezer… no para empresas normales, en mercados normales con presupuestos normales."

Y algo de cierto hay en eso. Siempre contesto que tienen razón: La Inteligencia Artificial no es para empresas normales. Pero la normalidad no tiene que ver con el tamaño, la industria o el mercado… ni siquiera con el presupuesto. La Inteligencia Artificial tiene que ver con empresas fuera de lo normal. Empresas que busquen:

  1. Hacer cosas distintas. Extraordinarias. Fuera de lo común.

  2. Competir en las grandes ligas, con los grandes, sin importar su tamaño.

  3. Diferenciarse y ser únicas.

  4. Hacer de la creatividad y la innovación su motor de crecimiento.

La Inteligencia Artificial tiene que ver con la visión, con la osadía. Tiene que ver con arriesgarse y con emprender. Con romper esquemas y salirse de la segunda caja, de la caja a la que brincas cuando sales de la primera caja. Con presupuestos modestos, pueden hacerse cosas fantásticas.

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¿Porqué es importante la IA?

Una persona común toma cerca de 2,000 decisiones diariamente, indica Harvard Business Review. Pueden ser más, muchas más, inclusive. Muchas de ellas pueden ser decisiones irrelevantes o de muy poca importancia. ¿Tomo mi café con leche o solo? ¿Uso los zapatos cafés o los negros? No consideremos en este caso el ya famoso “efecto mariposa”, el cual indica que toda decisión, incluso la más insignificante, puede alterar el curso de las otras cosas, incluso las más significativas. Volveremos a él más tarde. Así es que consideremos las decisiones más importantes que debemos tomar en el día, aquellas que afectan nuestra salud, nuestra seguridad, nuestras relaciones y por supuesto, en el trabajo consideremos los retos en la toma de decisiones, pero sobre todo, para tomar buenas decisiones, debemos entender porque tomamos malas decisiones:

Ahi te va una idea:

  1. Fatiga de decisión. No tenemos energía infinita para la toma de decisiones, al final, nos cansamos de pensar. Estudios indican que somos más efectivos en tomar decisiones por la mañana que por la noche. El trabajo de los ejecutivos se extiende, normalmente, hasta altas horas de la noche, lo cual hace que las decisiones se tomen con un cerebro fatigado. Pregunta: ¿Podemos ayudar a una persona cansada a tomar mejores decisiones?

  2. Distracción mental. No es secreto ni será sorpresa para nadie, el hecho de que el mundo está lleno de información. Se dice que nuestro cerebro procesa hoy 5 veces más información que en 1986. Existe un reto en tomar decisiones concentrado, enfocándonos y no distrayéndonos. Pregunta: ¿Podemos ayudarle a una persona a enfocarse más en la toma de decisiones correctas?

  3. Tiempo para pensar. La velocidad del mundo nos lleva a correr todo el día. Sobre saturar la agenda con juntas, una tras otra. Incluso, en muchas ocasiones, se atiende Whatsapp y correo electrónico durante una junta. Tres o más asuntos siendo procesados por el cerebro al mismo tiempo. El detenerse a pensar es, incluso, una muestra de debilidad. Las respuestas deben ser rápidas, certeras y estar siempre disponibles. Pregunta: ¿Podemos ayudarle a los ejecutivos a tomar mejores decisiones, más rápido y con más información?

  4. Multi-tasking: Todos los trabajos -casi todos- requieren algún tipo de multitasking. Estudios muestran que el desempeño cae hasta en un 40% en la toma de decisiones al estar en más de una tarea. Muchas empresas no se pueden dar el lujo de tener personal desenfocado. Dos o tres proyectos al mismo tiempo es importante para salir adelante -más aún en Latinoamérica. Pregunta: ¿Podemos ayudarle a un ejecutivo a controlar de forma más efectiva las múltiples decisiones que debe tomar al mismo tiempo?

  5. Emociones. Somos seres emocionales, sensibles, anímicos. Respondemos emocionalmente al entorno y nuestras decisiones se ven reflejadas en ello. Sufrimos durante un mes, semana o día, picos de felicidad o tristeza, alegría o enojo. La misma decisión tomada en un pico alto o bajo será completamente distinta. Pregunta: ¿Podemos ayudarle a un ejecutivo a tomar decisiones basadas en data y no en corazón, estómago o hígado (es decir emociones)?

  6. Parálisis por análisis. Buscar el momento perfecto, la información perfecta y el entorno perfecto para la perfecta decisión puede poner en riesgo un proyecto. Esperar y esperar hace que los proyectos se paralicen. En muchas ocasiones, el miedo nos lleva a no tomar una decisión pensando que es menos peligrosa una decisión no tomada que una decisión mal tomada. Pregunta: ¿Podemos contribuir a la continuidad en el negocio evitando que se detenga o que se patine?

https://hbr.org/2019/08/6-reasons-we-make-bad-decisions-and-what-to-do-about-f

Bien, pues para tomar buenas decisiones, deberíamos eliminar todos los anteriores retos. Básicamente relajarnos para tomar decisiones una a una, con información y en completa calma y silencio, sin distractores en un momento en el que estemos emocionalmente neutrales. Imposible. La otra opción es apoyarnos en tecnología. En Inteligencia Artificial, para ser más concretos. Así se pueden tomar mejores decisiones, más rápidas y más certeras. En una empresa mediana o pequeña así como en mercados emergentes, mejores decisiones son mejores resultados. ¿Es fácil? No. Desarrollar un modelo de Inteligencia Artificial es complicado por muchas razones. Primero debe asegurar que sea efectivo en término de los retos anteriormente planteados. Debe ayudar al ejecutivo a posicionarlo en un entorno de mayor competencia. Segundo, debe estar completamente alineado a los objetivos, tiempos, recursos e intereses del negocio, cuestión que veremos en el siguiente episodio.

Cerebro de silicio es más que un podcast. Es una producción de Azul Chiclamino. Yo soy Rodrigo Llop.

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